Las mujeres siempre han sido parte clave del sector de las tecnologías y la computación. En el siglo XIX, la condesa inglesa Ada Lovelace fue la primera persona en escribir un algoritmo matemático y Grace Hopper, una almirante estadounidense, desarrolló el primer compilador para un lenguaje de programación en los años 50. Desde el inicio del campo de la computación muchas mujeres trabajaron como computadoras humanas, personas que se dedicaban a hacer procesos matemáticos de manera manual, y sus contribuciones ayudaron al desarrollo del campo tecnológico como lo conocemos el día de hoy.
Sin embargo, a pesar del importante papel que han tenido, las mujeres siguen siendo relegadas a un segundo plano en el sector de la tecnología. Actualmente existe un fuerte desequilibrio entre el número de hombres y mujeres que trabajan en este campo. En los Estados Unidos, se estima que tan solo el 20% de todos los empleos en tecnología y computación son ocupados por mujeres. Este porcentaje también se refleja en empresas importantes del mundo digital como Google, Facebook y Apple. En el rubro de la innovación, liderazgo y emprendimiento digital, las cifras son mucho más desalentadoras. Se estima que solo el 5% de los dueños de start-ups y los líderes en empresas de tecnología son mujeres.La desigualdad no solo se refleja dentro de la industria, sino también en los consumidores. De acuerdo con una investigación, las mujeres tienen un 21% de probabilidad de tener un celular que los hombres. En cuanto a uso de internet, la Unión Internacional de Telecomunicaciones estima que la proporción de mujeres que usan internet es 12% menor que los hombres y en países en vías de desarrollo la diferencia se dispara a 32%.
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Estos números sobre el papel de la mujer dentro y fuera del sector digital nos da una muestra sobre los retos actuales que enfrentan las mujeres con la tecnología y el acceso a la misma.
Pero gracias a la lucha por incrementar la paridad de género en los espacios laborales, los cambios culturales y las iniciativas públicas y privadas; se ha puesto sobre la mesa la discusión sobre cómo hacer más accesible la industria para las mujeres. Actualmente hay varias estrategias que una empresa tecnológica puede implementar para promover un espacio más equitativo. Primeramente, es importante tener en cuenta la mentalidad de 50/50. Esta mentalidad busca reflejar la realidad de la población con los empleados de una organización, ya que la mitad de la población del planeta son mujeres, una organización también debería buscar que la mitad de sus empleados también lo sean.
Otras soluciones populares incluyen flexibilidad de horarios y home office. Al dar a las personas, especialmente a las mujeres, la autonomía para administrar su tiempo y balancear la vida personal y profesional, estarán más dispuestas a trabajar en una organización por más tiempo. En un artículo de Forbes sobre el tema de las mujeres en el campo de la computación, se destaca: “Los acuerdos de la flexibilidad laboral, que permiten horas a distancia y soluciones maleables al balance entre lo personal y laboral, son clave para el problema de fuga de cerebros y la falta de mujeres en niveles altos de las empresas de tecnología.”
También, organizaciones internacionales como la ONU han realizado iniciativas para empoderar a las mujeres en la industria digital. En el año 2010, la organización declaró el cuarto jueves de cada abril como el Día Internacional de las Niñas en las TIC, para alentar a las mujeres jóvenes a desarrollar una carrera profesional en las tecnologías de información. Fechas como estas, al igual que el Día de la Mujer, son celebraciones que las empresas deben de alentar para concientizar a sus empleados sobre la importancia de la paridad de género.
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También, los beneficios que la paridad de género tiene en la economía son bastantes y son un claro incentivo para que quitar las barreras que actualmente obstaculizan el desarrollo profesional de muchas mujeres a nivel global. La firma McKinsey estima que, si el mundo alcanzara una paridad total, el PIB global incrementaría por 28 billones de dólares en la próxima década.
Pero además de los incentivos económicos, el que ingresen más mujeres en el sector de las tecnologías, es una cuestión de igualdad y justica para ellas que desde el principio del campo han sido parte clave para su desarrollo. Alestra está comprometido en alcanzar una mayor paridad de género en el sector tecnológico y brindar espacios para que las mujeres jóvenes desarrollen sus carreras. Visita nuestra página oficial y conoce más sobre nuestra organización y compromiso con un mundo más justo y equitativo.
