La fuga de información en entornos personales o empresariales ha dejado de ser una molestia para convertirse en una amenaza para gerentes y equipos de TI. Sin importar su tamaño o actividad económica, cualquier empresa que ejecute aplicaciones o software tanto de forma local como alojadas en la nube , corren un alto riesgo de exposición a través de la filtración de los activos críticos que pueden llegar a definir su futuro.
En este sentido, además de los pasos fundamentales para proteger los activos informáticos dentro de la organización, como los firewalls de red, las tecnologías de seguridad efectiva o una cultura de la seguridad pueden ser de gran ayuda para prevenir la fuga de información.
A continuación, te explicamos qué es exactamente la fuga de información, qué riesgos supone para tu empresa, cómo detectarla y cómo prevenirla.
Los conceptos de fuga de información, escape de datos o filtración de información hacen referencia a la pérdida de datos sensibles o confidenciales, los cuales podrían caer en manos de personas no autorizadas para acceder a ellos.
La información perdida o filtrada puede ser de diversa naturaleza: datos personales, información sensible o hasta secretos empresariales, pero siempre conlleva algún nivel de riesgo.
Las fugas de información se pueden clasificar en función del origen de su causa y la intención que la acompaña.
Las causas de una fuga de información pueden ser de origen:
Sea cual sea el origen de esta fuga de información, la intencionalidad puede ser:
Dependiendo del origen y la intencionalidad detrás de una fuga de información, así como la naturaleza de los datos perdidos, podemos encontrar las siguientes consecuencias :
Entre las medidas para detectar una fuga de información , debes tener en cuenta lo siguiente:
La fuga de información es un riesgo de seguridad complejo que las empresas deben atender con medidas en el plano organizativo, técnico y legal . A continuación, revisamos los tres niveles de prevención en la fuga de datos que toda empresa debe considerar.
Las acciones de prevención organizativa las deben llevar a cabo los distintos equipos y departamentos que forman parte de la cultura de ciberseguridad que debe tener la organización.
Entre estas medidas de prevención organizativa, podemos destacar:
En este sentido, dado que el DLP depende en gran medida de una clasificación adecuada de la información, las organizaciones necesitan contar con una estrategia de protección de datos, principalmente dirigida a documentos confidenciales y a su manejo . Esta es una estrategia progresiva que se realiza paso a paso hasta obtener la madurez y control sobre la información.
En primer lugar, se clasifican los tipos de datos a las políticas concisas de la organización conforme al giro comercial o industrial al que se pertenece. Hay que dar prioridad a los módulos pequeños y a los puntos finales clave para proporcionar a los empleados oportunidades de aprendizaje antes de una implementación más amplia. Luego se debe tomar un período de revisión objetivo para los resultados iniciales.
Tener profesionales entrenados en una cultura de seguridad digital evita los accidentes y la pérdida no intencional de datos. Además, asegura una adecuada implementación de los protocolos previstos.
Las medidas legales deben ser tomadas en cuenta al momento de prevenir y gestionar fugas de información. En este aspecto, podemos mencionar al menos dos elementos que se deben tener en cuenta:
El nivel técnico es fundamental para prevenir cualquier tipo de fuga de información o de datos sensibles. Las medidas tecnológicas deben ser configuradas por expertos y, si es necesario, se debe recurrir a una asesoría especializada.
Entre las principales medidas tecnológicas, podemos mencionar:
En este sentido, las herramientas de supervisión del acceso y la actividad , ayudan notificando a los administradores con señales e indicadores que les advierten cuándo un usuario dentro de su infraestructura de red descarga, copia o elimina información.
Asimismo, una solución de monitoreo de la actividad de las bases de datos (DAM) puede proporcionar otra capa de protección detectando acciones no autorizadas. Mientras que el punto clave de un DLP está en la red y los puntos finales, DAM se enfoca en la actividad de la base de datos. El uso simultáneo de ambas soluciones proporciona una protección más amplia a través del uso estratificado de monitoreo y alertas, y bloquea usuarios o actividades sospechosas de forma remota.
La habilitación del cifrado en diferentes puntos de la red, incluidos los datos en reposo y en tránsito, puede proporcionar una protección significativa incluso contra los ataques más avanzados. Las empresas deben implantar un sistema de defensa en capas a través de redes encriptadas, administradas y monitoreadas.
En Alestra, como #EspecialistasenCiberseguridad, podemos ayudar a tu negocio a protegerse de fugas de información. Gracias a nuestras Soluciones de Ciberseguridad , podrás abordar todos los desafíos de seguridad de la información en un entorno cada vez más digitalizado: desde la identificación de los riesgos hasta la implementación de medidas de protección avanzadas para prevenirlos, detectarlos y combatirlos.
Además, estamos #ConectadosContigo y ponemos a nuestros expertos a la disposición de tu organización para asesorarte según las necesidades específicas de tu negocio, con el fin de evitar poner en riesgo tanto la información como la operación total del mismo.
Gerente Ciberseguridad
Es Master en Ciencias Computacionales con especialidad en Teleinformática e Ingeniero en Electrónica y Comunicaciones por la Universidad Autónoma de Nuevo León. Tiene más de 29 años de experiencia en el ramo de las Telecomunicaciones y Tecnologías de Información. Cuenta con certificaciones de Managed Service Provider Professional y CompTIA Security+, así como experiencia en la Integración y Automatización de Sistemas, Logística, Control de Calidad en petroquímica, bioquímica, farmacéutica, científica-médica, analítica y ambiental. Forma parte de Alestra desde 1996 y actualmente se desempeña como Gerente de Estrategia de Ciberseguridad.